Opinión

COLUMNA EPD: «Subamos el estándar de la democracia»

Las nuevas generaciones del país, han estado criticando nuestra democracia y nuestras instituciones, también lo ha hecho la sociedad organizada a través de los movimientos sociales reivindicativos. Nadie pide modificar lo que satisface, es de perogrullo, sin embargo, a veces, nuestra elite -con la prepotencia intelectual de las elites-, no alcanza a percatarse  de lo que percibe la ciudadanía, cuestión que pareciera ocurrir, cuando actores como el senador de la UDI, Jovino Novoa, sostiene que la discusión del sistema binominal no es un tema que le interese a la ciudadanía.

 

 

Por Jorge Díaz Guzmán (*)
jdiazguzman@elpatagondomingo.cl

 

 

¿Tiene que ver la calidad de la democracia con la calidad de vida de un país?

La respuesta pareciera estar en las conversaciones, aunque con dificultad, mantiene el oficialismo con la oposición, porque así como el desarrollo económico, el desarrollo de la infraestructura pública, es fruto del esfuerzo que hacen las fuerzas productivas, así también la construcción de la democracia debiera ser fruto de los actores políticos y sociales.

La democracia no es un sistema estático, porque las formas de participación de los ciudadanos en la vida nacional,  son en sí mismos, un proceso dinámico. Nuestra novel democracia, ha ido madurando con el tiempo, desde el derecho voto para  quienes tenían rentas, en los orígenes de la república, hasta  los jóvenes de 18 años, inscripción automática y voto voluntario.

Respecto del sistema proporcional chileno, que hoy se reclama para elegir a los legisladores, ya fue acordado en la reforma constitucional de 1888, por tanto recuperar ese sistema que garantiza la representación de las mayorías y minorías en el Congreso, no sería más que retomar el rumbo que el país se dio hace más de 130 años.

Las nuevas generaciones del país, han estado criticando nuestra democracia y nuestras instituciones, también lo ha hecho la sociedad organizada a través de los movimientos sociales reivindicativos. Nadie pide modificar lo que satisface, es de perogrullo, sin embargo, a veces, nuestra elite -con la prepotencia intelectual de las elites-, no alcanza a percatarse  de lo que percibe la ciudadanía, cuestión que pareciera ocurrir, cuando actores como el senador de la UDI, Jovino Novoa, sostiene que la discusión del sistema binominal no es un tema que le interese a la ciudadanía.

Lo interesante del debate por estos días en Chile, es que después de 22 años desde la recuperación de la democracia, con el concepto “en la medida de lo posible”, hay cierto consenso en que ya no satisface y no cuadra con el desarrollo del país. En 1990, teníamos un ingreso per cápita de unos 3 mil dólares y hoy estamos en torno a los 15 mil dólares, entonces el estándar de nuestra democracia debiera ser coherente con ese indicador. Lo propio ocurre con la educación, pasamos de 150 mil estudiantes universitarios a casi un millón, entonces lo que deben considerar nuestra clase dirigente, es que el mayor acceso a la educación superior, no es solo para aumentar la productividad en todos los sectores de la economía, sino que también, y principalmente diría yo, para tener una mayor masa crítica, ciudadanos de mejor calidad, para tener ciudadanos ejemplares, los que naturalmente exigirán una democracia de mejor nivel.

Los ciudadanos somos mejores cuando las instituciones del Estado funcionan adecuadamente, cuando los deberes y derechos están equilibrados, y está probado, que cuando existe sintonía entre  los ciudadanos y quienes los representan en  las estructuras de poder, el sistema democrático mejora su estándar. La democracia no se sustenta en sí mismo,  sino en la calidad de sus ciudadanos.

(*) Es Comunicador Social y Director Ejecutivo de EPD Comunicaciones Ltda.
 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *